Su amor había llegado como un tornado.
Un tornado había derribado el aeropuerto de Red
Rock, dejando enterrados bajo los escombros al empresario Scott Fortune y a la
camarera Christina Hastings. Y en esas horas de batalla contra la muerte, el
millonario soltero se enamoró. El doloroso pasado de Christina le impedía creer
en cuentos de hadas. Había encontrado seguridad, incluso pasión, en los fuertes
brazos de Scott, pero los finales felices no eran para una chica como ella, y
menos con un hombre como Scott. Sin embargo, le resultaba cada vez más difícil
resistirse a los muchos encantos del caballero sureño